31 agosto 2021

#EstrellasDeTinta Doppelgänger

Este es mi microrrelato de agosto para el reto de escritura Estrellas de tinta, organizado por Katty Cool. Puedes leer las instrucciones del reto (y solictar apuntarte) en la bitácora de la organizadora:

https://plumakatty.blogspot.com/2020/12/estrellas-de-tinta-reto-de-escritura.html

En esta ocasión, voy a poner objetivos y objetos delante, asi como número de palabras.

Objetivo que cumple: 19—Escribe sobre algo sobrenatural.

Objeto oculto:

12- Una Libreta

Son 248 palabras según https://www.contarcaracteres.com/palabras.html

Por cierto, supongo que se captará el humor absurdo de la situación planteada, que está en el método de trabajo de la protagonista del microrrelato.

Aquí está la etiqueta del mes:





Y mi recomendación de este mes es para el relato de agostode Katty Cool, que podéis leer aquí: https://plumakatty.blogspot.com/2021/08/traigo-para-el-reto-de-escritura.html

Aqui el micro. Esta basado en una pesadilla recurrente que tenía cuando era niño. Espero que os guste.


DOPPELGÄNGER


Le di un beso en la mejilla a Natalia, que veía un documental.

—Voy a afeitarme —le dije.

Ella se giró y me dio un beso breve en los labios. Me fui al cuarto de baño de aquella bonita casa rural.
Me quedé helado. El corazón se me desbocó. La puerta estaba cerrada y alguien se duchaba. Retrocedí muy despacio, agarrotado. Dos minutos después, se abrió la puerta. Salió una mujer idéntica a Natalia, con una toalla anudada al pecho y otra liada a la cabeza. Se acercó, me dio otro de sus besos breves en los labios y salió al salón.

Temí por mi novia. Regresé al salón, pero ella se limitaba a tomar notas en una libreta.

—Tenemos que irnos —le dije tirando de ella.

Natalia miró detrás de mí y abrió mucho los ojos. La otra estaba en la puerta de la cocina, con la misma expresión atónita. La Natalia que tenía delante blandió un atizador y se me acercó con expresión enloquecida. La de la toalla tiró de mí. Cerré la puerta y la otra Natalia la golpeó, gritando cosas terribles.

La otra Natalia se me abrazó, llorando. La puerta cedió y mi novia quiso golpear a su doble, pero me alcanzó a mí.

Cuando desperté, tenía sangre seca en el rostro. Natalia, sentada en el suelo, me abrazaba. Lloraba y me pedía perdón. A mi lado había dos toallas y ni rastro del doble de mi novia.

Nunca comprendí que sucedió aquel día.


1 comentario:

Cabrónidas dijo...

Es una reacción lógica. El ser humano es violento, y con violencia responde ante lo que no entiende. Una pena; hubiera sido una gran ocasión para hacer un trío y disfrutar.