29 diciembre 2011

Mundo de cenizas. Descripción de los personajes e inciso

Voy a publicar hoy un texto que escribí hace meses para esta novelita por entregas que voy publicando en la bitácora. Trata de dos temas fundamentales.

La primera trata sobre los personajes de la historia. No tengo la suerte saber escribir y dibujar, como le pasa a Luisa, y a falta de un ilustrador que les ponga cara a los personajes, lo que hice fue describirlos con palabras. Son aputes tanto físicos como, en cierta medida, de personalidad. En este inciso os voy a poner la descripción de los personajes, por orden de aparición:

Juan

Tiene 20 años recién cumplidos. Mide 1,74 y podríamos considerar que es apuesto, aunque no llegue a la condición de galán. Simplemente, tiene un cuerpo atlético y bien proporcionado, modelado por las sesiones de entrenamiento propias de la profesión que le ha elegido, y un rostro que resulta atractivo. Su cabello, que lleva corto, es castaño oscuro y tiene los ojos marrones. No luce barba ni bigote y, salvo que no tenga tiempo para acicalarse, suele ir muy bien afeitado. Tiene un tono de piel mediterráneo; la piel blanca aunque no tanto como la de un nórdico.

A destacar que controla bastante bien su fuerza, y aunque tiene la suficiente para ser firme, suele ser muy cuidadoso. Por ejemplo, si tiene que agarrar a alguien de un brazo, lo hace sin apretar, y no da tirones bruscos.

Raquel

Es una chica de 19 años. Mide 1,68, lo que la hace ser de las más altas de su grupo de amigas. Tiene un rostro bastante normal tirando a poco atractivo, aunque goza de una figura espléndida. Es elegante, muy bien proporcionada, como Juan, y tiene unas piernas muy bonitas, aunque no deja que nadie se las vea porque es muy tímida y algo recatada. Como ya he comentado, está muy bien equilibrada: no tiene ni demasiado ni demasiado poco pecho, tiene la curva justa en las caderas para resultar atractiva…

Tiene unos ojos castaños claros que llaman la atención cuando se habla con ella, pero lo que más destaca es su cabello. Luce una melena larga y ondulada, de color castaño oscuro, que se deja crecer hasta unos diez centímetros bajo los hombros y que cuida con mucho esmero. Es muy raro verla con el pelo revuelto. Se ruboriza con mucha facilidad. Por último, tiene el mismo tono de piel que Juan.

Christine

Es una muchacha de 19 años de aspecto nórdico. Su piel es muy blanca y si luce el sol con fuerza, se quema con facilidad. Tiene el cabello de color rubio dorado y liso, pero no lo lleva demasiado largo, apenas hasta la mitad del cuello, para que no le estorbe al atender a enfermos o luchar con la espada.

Mide 1,79, lo que la hace más alta que la mayoría de los hombres de su entorno. No obstante, no es una chica muy agraciada. Es muy delgada por constitución y bastante huesuda, lo que no quita que sea fuerte para tratarse de una mujer. Tiene un rostro de rasgos angulosos y muy marcados, poco atractivos. La excepción son sus ojos, de mirada serena y de color azul oscuro, que son muy bonitos.

Es un tanto desgarbada; se mueve sin mucha gracia, si bien, a la hora de combatir sus movimientos poseen bastante seguridad y, sobre todo, velocidad. Es buena corredora y goza de una resistencia física elevada, en parte por constitución y en parte por su autodisciplina y su capacidad de aguantar el dolor o el cansancio, pero sólo es buena corriendo en llano, no tanto a campo traviesa.

Adriana

Es bastante joven, ya que tiene 17 años, a punto de cumplir los 18. No levanta demasiado del suelo, puesto que mide 1,58. Sin embargo, es una mujer extraordinariamente atractiva, no sólo por su cuerpo sino por sus gestos y su actitud. Es de ese tipo de mujeres que cuando habla con alguien sabe inclinar la cabeza con gracia, de las que toda la ropa que se ponen les queda bien, de esas chicas a las que el cabello les cae siempre sobre los hombros de la forma más atractiva posible…

Tiene el pelo largo, muy negro, y se lo deja crecer hasta la mitad del pecho. Su cabello posee una ondulación natural suave, aunque se va rizando más hacia las puntas. Tiene los ojos negros y un rostro bellísimo de facciones delicadas. Cuando sonríe, enseña unos dientes perfectos.

Es una seductora natural, con muy poco recato, que sabe bien cómo lucir el cuerpo que tiene. Es de ese tipo de chicas que si tienen que ponerse un buen escote o enseñar una pierna, lo hacen sin el menor remilgo y, además, se exhibe con tanta naturalidad que suele descolocar a cualquier hombre que hable con ella. De hecho, le divierte bastante darse cuenta que el hombre que tiene delante se ve en serias dificultades para impedir que se le vayan los ojos adonde no deben.

Pablo

Es un joven de 22 años que, sin embargo, aparenta menos. Mide 1,68 y es un muchacho de constitución delgada, si bien, su aspecto es algo engañoso, ya que tiene bastante fuerza. De hecho, si enseñara el torso, se le vería una musculatura bien desarrollada y sorprendente en quien parecía un joven delgado y no muy alto. Tiene un rostro bastante normal, que no resulta ni atractivo ni feo. Suele dejarse algo de barba y bigote, aunque nunca deja que le crezca más de un par de centímetros. El propósito de llevar barba es que, si comete algún “error”, se afeitará para despistar a las autoridades.

Tiene el pelo negro, habitualmente corto aunque algo más largo de lo usual en Nêmehe, y los ojos de color marrón oscuro. Su piel es ligeramente aceitunada, un poco más tostada que la de Juan o Raquel, pero muy poco más. Algo muy característico de él es que es muy expresivo y, al hablar, hace muchos gestos con los brazos y las manos. Muy ágil y de movimientos veloces, es capaz de moverse con mucha elegancia y es bueno en actividades acrobáticas y baile. Si tuviera más larga la zancada, sería un corredor excelente.

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La segunda parte de este inciso tiene ver con que cada uno de los personajes tiene su ficha correspondiente de acuerdo con un sistema de juego concreto. Como en la mayoría de juegos de rol, cada personaje va ganando experiencia, va subiendo niveles y se va haciendo más poderoso a medida que avanza el relato. Pues voy a poner ahora los puntos de experiencia que ha ido ganando cada uno. Tienen que llegar a 5000 para tener un pequeño avance en algunas características, y a 10.000 para pasar a nivel 2. Ahora todos son de nivel 1, que es por donde deben empezar los personajes.

Los puntos que tienen hasta este momento (hasta la mitad más o menos del capítulo XXXI) son:

Juan: 3.508

Pablo: 2.088

Raquel: 663

Adriana: 424

Christine: 134

Como veis, aún les falta mucho hasta los 10.000, aunque Juan ya no está muy lejos de los 5.000. Le vendrá bien hacerse una mijita más fuerte.

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