Leídos: La Silla de Plata y La última batalla, Vols. 6 y 7 de Las Crónicas de Narnia

Un "pico" de trabajo me ha tenido apartado de aquí, así que no me ha dado tiempo a dedicar una entrada por libro... así que dos en una.

Con estos dos libros, que se leen cada uno en una tarde, termino la serie de Las Crónicas de Narnia, de C. S. Lewis. Son unos libros muy bonitos, orientados mucho a los niños. La técnica narrativa es poco utilizada y recuerda la manera en que le contarías un cuento a un niño. Hay muchas explicaciones, de vez en cuando, se dirige de tú al lector...

Sigo pensando que el quinto libro de la serie es el más bonito de todos, aunque el séptimo también esté lleno de belleza y sea un final bastante digno a la serie.

Ahora sí, el sexto tenía sorpresa. Después de haber leído una historia completamente fantástica, con seres extraños, hechos inusuales, y demás, C. S. Lewis nos sorprende con el siguiente párrafo, referido a una directora de un colegio:

"Después de aquello, los amigos de la directora se dieron cuenta de que no servía para el puesto, de modo que consiguieron que la nombraran inspectora para que pudiera entrometerse en el trabajo de otros directores. Y cuando descubrieron que tampoco servía para aquello siquiera, la introdujeron en el Parlamento, donde vivió felizmente para siempre".

Lo que tuve que reírme con la ocurrencia... Por cierto, se refiere al Parlamento británico... aunque no sé si el autor es demasiado duro...