19 febrero 2007

Respondiendo a Lillu sobre extraterrestres

Esta entrada estaba destinada a ser un comentario de respuesta a este comentario, pero me ha quedado tan larga, porque me entusiasma tanto el tema, que la convierto en entrada, para que se lea mejor y para ver si más gente se anima a participar.

Te respondo, Lillu:

Lo primero con que empiezas tiene mayor interés de lo que parece, y es la definición de inteligencia. No está claro lo que es una especie inteligente. Pero esto tampoco es de extrañar porque, por mucho que digan ciertas corrientes de la psicología, tampoco sabemos comparar entre sí inteligencias de miembros de la misma especie. ¿Quién es más inteligente, un filólogo o un físico? ¿Un criptólogo o un lingüista de esos que consiguen descifrar textos en lenguas olvidadas? La asignación de un parámetro, como el Cociente Intelectual, a cada uno difícilmente significa algo, cuando un físico con un CI de 105 es capaz de hacer cosas que están fuera del alcance de un zoólogo con 105 y viceversa.

Vayámonos al caso de civilizaciones alienígenas. ¿Cuál estaría más avanzada, una de capacidades tecnológicas impresionantes, o una sin tecnología pero que ha desarrollado unos conocimientos filosóficos y científicos enormes que se transmiten de padres a hijos de forma verbal? La primera sería detectable por sus emisiones, la segunda no. Aún más, ¿qué civilización sería más avanzada, una de alto nivel tecnológico pero gran torpeza industrial, o una con menos nivel tecnológico pero que organiza tan bien su producción que es capaz de lanzar miles de satélites artificiales y cohetes anticuados en breve plazo? Esta segunda sería más fácil de detectar. Finalmente, como la idea es captar emisiones que se han escapado sin intención, será más fácil localizar a civilizaciones que no se preocupen demasiado por el ahorro energético.

En cuanto a si la vida tiende o no a la inteligencia, lo resumes muy bien tú. Está por ver que la tecnología y la inteligencia nos hagan más aptos para sobrevivir. Pienso que es posible que la inteligencia tenga algún valor evolutivo, pero no es lo que determina el éxito. Es un punto fuerte más de las especies, al mismo nivel que la agilidad, la capacidad de volar, o cualquier otro.

Con respecto a lo demás que me comentas, unas definiciones. Existen dos posturas esenciales: la "optimista", defendida normalmente por astrónomos y astrofísicos, que dice que la galaxia está llena de civilizaciones alienígenas, y la "pesimista", la posición de los biólogos y otros muchos, entre ellos, los físicos españoles que conozco, que dice que las civilizaciones son una rareza cósmica. Yo pienso lo segundo. Te contesto:

a) Tu punto de vista es el mismo que el de Fermi, que enunció una paradoja, al menos para lo que respecta a la rama "optimista" que va, más o menos, de lo siguiente: supongamos que hay 10 civilizaciones en la galaxia capaces de alcanzar una nueva estrella cada 1.000 años, lo que no es una cifra descabellada; (nosotros tendríamos, si quisiéramos, tecnología suficiente dentro de unos 50 años para llevar una nave sin tripulación a Alpha Centauri en un siglo... es largo de contar). Teniendo en cuenta las dimensiones de la galaxia, se hace un cálculo sencillo y se ve que deberían habernos encontrado ya. Que no lo hayan hecho, si hay muchas civilizaciones, es paradójico. De cualquier manera, la réplica "optimista" se basa en un hecho muyr curioso, y es que, salvo que mires atentamente, las señales que emitimos los terrícolas son tan débiles que los astrónomos alienígenas podrían no darse cuenta de que en la Tierra hay una civilización técnica. Está argumentado qué tipo de cosas impedirían que nos detectaran desde fuera. O sea, podrían haber pasado rozándonos y no habernos visto. ¿Mi opinión? Una frase muy manida: "la ausencia de prueba no es prueba de la ausencia", aunque es muy significativo que no se hayan puesto en contacto con nosotros.

b) O no quieren ser identificados, o no usan nuestras vías de comunicación. Ambas son ideas razonables. Los biólogos de campo procuran pasar lo más desapercibidos posible, para no perturbar las especies que están estudiando. Otra cosa diferente es que lo consigan. En nuestro caso, sería posible engañarnos si no se nos acercan mucho, pero dado que tenemos un conocimiento razonable de las leyes que rigen la navegación espacial, no sería fácil. Luís Ruiz de Gopegui, que es un defensor de la causa "pesimista", en 82 Erídano describe la aproximación de una nave alienígena a la Tierra y los astrónomos la descubren porque se dan cuenta de que lo que creían un asteroide se aproxima al Sistema Solar interior siguiendo órbitas que le permiten aprovechar tirones gravitatorios. Las cantidades de energía involucradas en el vuelo interestelar son tal elevadas, que es imprescindible la economía, y esto es cierto objetivamente, por muy alta tecnología que tengas. Esto es, que por muy inteligente que seas, te pueden pillar por cualquier tontería. Que no usen nuestros canales de comunicación puede ser, aunque es muy poco probable que, si ya han alcanzado algún tipo de comunicación indetectable para nosotros, no hayan atravesado una fase en la que usaron la radiación electromágnética. Podría ser que su tecnología no se basara en máquinas sino en ingeniería genética (como los bichos de Tropas del Espacio - Starship Troopers -), pero dado que la radiación elecromagnética es la forma de comunicación más rápida que puede existir y se encuentra al alcance de niveles tecnológicos muy primitivos, es muy probable que, alguna vez, la hubieran usado.

El proyecto SETI, en cierto modo, también es arqueológico. Si algún día viéramos algo, podría ser que la especie que lo emitió ya ni siquiera exista. O que haya cambiado tanto que esas emisiones no tengan nada que ver con su estado actual. Pero ver algo ya sería importante.

Acabando, acabando, llegamos a lo del holocausto nuclear y las cucarachas. Uno de los impulsores de la vertiente "optimista", el desaparecido Carl Sagan, daba gran importancia a los últimos factores de la Ecuación de Drake, que daban la posibilidad de que una civilización avanzada se destruyera a sí misma, y que de su biosfera solo sobrevivieran las cucarachas, que lo aguantan todo. Estoy, desgraciadamente de acuerdo, aunque mi opinión es que habría que introducir un factor adicional en la fórmula, que diera la probabilidad de que una raza inteligente acabara desarrollando una civilización tecnológica. Lo que te dije antes, imagínate que el Imperio Romano hubiera prevalecido. Una sociedad esclavista difícilmente desarrollará tecnología.

Ya estamos metidos en el debate físicos, astrónomos, astrofísicos y biólogos evolutivos (y tú). Ahora tendrían que meterse también los sociólogos, los historiadores y, quizá los psicólogos, para que estudien la relación entre mentes individuales y actuación de colectividades.

2 comentarios:

Lillu dijo...

Jaja wow! Gracias por dedicarme todo un post :D

La verdad q yo no puedo aportar gran cosa a nivel científico sobre el tema. No lo he estudiado tan a fondo y lo único q puedo mantener son las opiniones q me formo a partir de artículos, documentales y otras fuentes de información q consulto de vez en cuando.

No sé si me encuentro en la vertiente optimista o en la pesimista. Creo en la existencia de otras civilizaciones, posiblemente más avanzadas q la nuestra, pero el hecho de q no haya habido hasta ahora ninguna señal clara de contacto me hace pensar q la comunicación está más q complicada. Soy de las q piensa q creernos los únicos seres inteligentes del universo es una postura un tanto ombliguista y demasiado escéptica, aunque está claro q lo contrario tb requiere de una porción generosa de algo más cercano a la fe q a la ciencia.

Bonito debate! (Volveré a leer tu post sin fiebre a ver si me he perdido algo, es q toi malita :/)

Saluditos!

Anónimo dijo...

Gracias por tu paseo por mi fotonlog y por tu comentario, de verdad, muchas gracias. Saludos.